http://buscador.lanacion.com.ar/Nota.asp?nota_id=1014851&high=atentado

El fiscal Alberto Nisman, que investiga el atentado terrorista contra la mutual judía AMIA, pidió la detención del ex presidente Carlos Menem, de su hermano Munir, del ex jefe de la SIDE Hugo Anzorreguy y del ex juez federal Juan José Galeano, a quienes acusó de frenar la investigación de una pista que apuntaba al ciudadano de origen sirio Alberto Jacinto Kanore Edul. El fiscal, en un escrito que presentó ante el juez Ariel Lijo, entendió que los lazos familiares que se remontan a la aldea siria de Yabrud, entre el padre de Edul y el de Menem, son el comienzo de la relación entre ambos y engendró la obligación de proteger a su hijo. Ahora Lijo enviará la denuncia al fiscal Patricio Evers, que decidirá si encuentra elementos para impulsar el caso contra Menem. Ante la presentación, el ex presidente reaccionó con indignación: "El gobierno del matrimonio Kirchner usa sistemática y vilmente el caso AMIA con fines facciosos y de encubrimiento de sus maniobras. Lo vuelve a hacer ahora, cuando lanza a los diarios, con la firma de un fiscal adicto, una imputación absurda y arbitraria contra mí". Kanore Edul está investigado en la causa AMIA porque el 10 de julio de 1994, supuestamente el día en que la Trafic usada como coche bomba pasó a mano de los terroristas, llamó al dueño de la camioneta, Carlos Telleldín. Además, en su agenda se encontró el número de Mohse Rabbani, ex secretario cultural de la embajada iraní en Buenos Aires. Pero por ahora Kanore Edul es una pista a la que apunta el fiscal, mientras espera información de inteligencia que refuerce sus sospechas. Kanore Edul sigue viviendo en la Argentina como su padre, un señor de 85 años con problemas de salud, que supo ayudar a Menem en su campaña y cuando el riojano se instaló en Buenos Aires. "Esto es un operativo del Gobierno contra Menem. A Kanore Edul no le probaron nada", disparó su abogado Juan Gabriel Labaké. Nisman basa su acusación, que alcanza también al ex subdirector de la SIDE Juan Carlos Anchezar y al comisario general retirado Jorge Palacios, en que al inicio de la causa AMIA, cuando se detectó que Kanore Edul llamó a Telleldín, Galeano ordenó intervenir sus teléfonos y allanar tres domicilios que se habían detectado el 31 de julio. Para Nisman, a partir de ese día la actitud del juez con Kanore Edul cambió. Por ejemplo, se allanaron sólo dos de los tres lugares. Explicó que Palacios llamó desde un teléfono a su nombre a un número de Kanore Edul no registrado en la causa, mientras se hacían los procedimientos. Pero además destacó que las escuchas a los teléfonos de Kanore Edul se interrumpieron sorpresivamente a los pocos días, por indicación de la SIDE y las grabaciones y las transcripciones de las llamadas realizadas desde la casa de Kanore Edul desaparecieron. Pudo reconstruirlas a partir de las copias archivadas en la SIDE. Allí se destaca una comunicación mantenida por Kanore Edul con la Secretaría de Audiencias de la Presidencia, donde avisa del allanamiento y la necesidad de evitarlo y le sugieren comunicarle el asunto a Munir Menem, a lo que accede. En ese entonces, el padre de Kanore Edul, supuestamente habría concurrido a la Casa de Gobierno para evitar el procedimiento, según se desprende de otra escucha reconstruida. Desde ese día se frenó la causa contra Kanore Edul. Claudio Lifschitz, ex funcionario del juzgado de Galeano, declaró en el juicio oral por el ataque que la pista de Kanore Edul no se siguió porque Munir Menem había llamado al magistrado. Dijo que lo supo de boca de los secretarios del juez. Nisman destacó que Cristina Kirchner, cuando era senadora, declaró en el juicio oral que le preguntó a Galeano si Munir Menem lo había llamado, que le respondió que no lo recordaba, lo que para la actual presidenta consideró como una admisión. No obstante, apuntó contra Menem con una construcción lógica: entendió que como jefe de Anzorreguy era quien tenía poder para frenar la investigación de esta pista. Por Hernán Cappiello De la Redacción de LA NACION Respaldo del FBI
· El subdirector nacional del FBI, John Pistole, se comprometió ayer ante las autoridades de la comunidad judía argentina a que ese organismo de seguridad estadounidense continuará "apoyando y trabajando" junto a la Justicia para esclarecer el atentado terrorista que destruyó la AMIA en julio de 1994. Pistole hizo estas declaraciones al visitar la sede de la AMIA, en Pasteur 633.



Esta bien que lo hallan mandado a la cárcel.
John Pistole se comprometió a seguir opinando de mandarlo si o si a la cárcel a Menem.
Kanore Edul está investigado en la causa AMIA porque el 10 de julio de 1994, supuestamente el día en que la Trafic usada como coche bomba pasó a mano de los terroristas, llamó al dueño de la camioneta, Carlos Telleldín. Ahora Kanore Edul es una pista a la que apunta el fiscal, mientras espera información de inteligencia que refuerce sus sospechas.